LOS RIFLES CENTROEUROPEOS (continuación)
El
precio de estos rifles resulta bastante alto, tanto entre los
originales como con las réplicas, y además resulta un poco más
complejo su funcionamiento y la obtención de buenos resultados
requiere
de un mayor entrenamiento, por lo que es el arma indicada para
los más experimentados tiradores. Actualmente son varios los
fabricantes que producen réplicas de este tipo de armas, aunque
por un precio similar podemos adquirir alguna pieza original que
seguro nos llenará de una mayor satisfacción.
Carabina Federal Suiza original con
diópter réplica de tipo suizo añadido a la misma.
Estos
rifles se diseñaron exclusivamente para el tiro de
precisión a corta y media distancia en la posición “de pie”.
Esta modalidad deportiva estuvo
muy de moda en algunos países del centro del continente europeo
durante los siglos XVI al XX, como lo atestiguan múltiples
grabados de la época. Existen muchas variantes de este tipo de
rifles, si bien todos tienen el mismo denominador común
mencionado anteriormente.
La
historia de algunos clubes deportivos, como el de Pforzheim
(Alemania) en el que se han celebrado algunos de los últimos
campeonatos internacionales (1989, 1999, 2005 y 2012), así lo
atestiguan. En sus instalaciones pude apreciar unos blancos
conmemorativos (se disparaban en navidad) muy peculiares, el mas
antiguo que pude observar y publicado en la parte 2ª de este
trabajo, está fechado en 1660. Parece ser que los primeros de ellos
estaban fabricados a partir de tapas de barril de cerveza y decorados
posteriormente y para la ocasión con pinturas
mas o menos acertadas.
Respecto de la variante para el uso militar, mencionada
anteriormente, la carabina Federal Suiza, destacar que su diseño
y características derivan de las armas deportivas coetáneas, con
algunas adaptaciones para el uso militar a que estaban
destinadas. Una de estas adaptaciones es la robusta y elaborada
mira trasera con divisiones para el tiro a larga distancia.
Este tipo de rifles estaban a medio camino entre lo
civil y militar, y generalmente era entregado a las milicias en
propiedad. Actualmente se pueden conseguir algunas piezas
originales a precios no excesivos y tienen
unas excelentes cualidades para el tiro deportivo en Vetterli
original.
En la
carabina Federal, también en algunos rifles deportivos
originales, el
pico superior de la rabera iba roscado con el fin de poderlo
extraer para facilitar el tiro en la posición de tumbado. Cuentan con un cañón más ligero, madera hasta la boca y
austeros y robustos elementos de puntería, generalmente miras
abiertas, que estaban formados por un alza regulable en altura
con varias divisiones marcadas y punto de mira simple montado en
“cola de milano” para facilitar su regulación en deriva. Estos
rifles no se clasifican como de armas militares, porque no
reúnen los requisitos indispensables y uno de ellos es su
pequeño menor.
Los
elementos de puntería se pueden mejorar siguiendo las
recomendaciones del Reglamento MLAIC. Generalmente con un
diópter en la parte trasera y túnel delantero con punto de bola,
aunque también se fabricaron con algunas otras combinaciones.
Carabina Federal Suiza en una de sus
variantes con diópter original.
RIFLES MILITARES
Cada
vez resulta más común observar que algunos tiradores emplean
este tipo de rifles en las competiciones de Vetterli,
especialmente en la variante original. Los rifles militares conocidos como Minié, son armas aptas para esta disciplina y
en algunos casos, y a pesar de los inadecuados elementos de
puntería (no pensados para el tiro de precisión), se obtienen
marcas excelentes que igualan o superan a las
conseguidas con rifles específicos como los mencionados del tipo
centroeuropeo.
Con
este tipo de fusiles, tendremos que ceñirnos a las disposiciones
que existen sobre los mismos, y aunque vayan a ser empleados en
una disciplina no militar como es Vetterli, no podremos mejorar
los elementos de puntería, emplear embudos largos de carga, ni
limpiar el cañón entre disparos o emplear otro proyectiles
diferente de los diseñados originalmente para ellos. Al menos
con las normas al momento de redactar este trabajo.
En
todos los casos son armas de culata recta, generalmente largos,
gran calibre que oscila entre el .54 y el .58 (13,7 a 14,7 mm) y
elementos de puntería de los denominados miras abiertas. Además no se pueden alterar en su forma, tan solo pequeñas
modificaciones para corregir el punto de impacto, pero sin
alterar la forma original de las miras.
Tal
vez la única ventaja que presentan es la excelente precisión que
se obtiene con los pesados proyectiles minié a bajas
velocidades y la facilidad de carga y ejecución del disparo. Es por todo ello que a pesar de las desventajas
aparentes, se están consiguiendo marcas interesantes y cada vez
son más los tiradores que los emplean como alternativa a los
rifles más modestos como el Hawken o similares.
Estos fusiles
son armas que pueden utilizarse en
varias disciplinas, como Vetterli, Lamarmora y Minié
Continúa en la parte
4ª