El aplicador de
grasa es un útil sencillo que facilita el
reglamentario sellado de las recámaras depositando
una mínima cantidad de grasa sobre el proyectil. Ello permite cargar el
revólver sin necesidad de que los proyectiles queden
cerca de la boca de la recámara. Producidos en nylon (negro) con una buena
aceptación. A requerimiento de algunos
tiradores de prestigio, nos hemos decidido a
fabricarlos en otros materiales,
como el latón y el aluminio. Los tres modelos
son idénticos y cumplen perfectamente su
cometido, adquirir uno u otro será cuestión de
gustos.
Aplicador de grasa NYLÓN (negro) para revólver de calibre .44
.- 10 €
Aplicador de grasa ALUMINIO para revólver de calibre .44
.- 14 €
Aplicador de grasa LATÓN para revólver de calibre .44
.- 18 €
Aplicador de grasa
NYLÓN (negro) para revólver de calibre .36
.- 10 €
Aplicador de grasa ALUMINIO para revólver de calibre .36
.- 12 €
Aplicador de grasa LATÓN para revólver de calibre .36
.- 15 €
Cogemos un poco de grasa en la parte
cóncava del aplicador.
Apoyamos el aplicador sobre el proyectil
cargado.
Una
vez situado giramos el aplicador un
cuarto de vuelta.
Sellado de
la recámara con un
mínimo de grasa.
Recámara cargada y sellada.
Otra
forma de sellar de forma sencilla, puede
ser depositando una pequeña cantidad de
grasa sobre cada proyectil y
posteriormente y con el aplicador,
repartirla sobre el perímetro del
proyectil.